Este no es solo un café. Es una bienvenida al café de especialidad.
Una invitación a dejar atrás el torrado, y la idea de que el café es amargo y negro.
Cuando probamos café de especialidad por primera vez, pueden sorprendernos los distintos aromas y sabores. Generalmente dulces, ácidos, florales y frutales.
Es como pasar de un vino blanco dulce a un tinto complejo: al principio choca, hay que acostumbrar el paladar, pero después lo amás. (ya me salió lo mendocino)
Por eso este blend está pensado especialmente para quienes se están iniciando.
Es amable pero no plano, complejo pero no abrumador. Tiene el equilibrio justo para que empieces a descubrir lo que puede ser un buen café... y no quieras volver atrás.
Con Java-Pacamara, empieza otra forma de tomar café en Argentina: más consciente, más honesta, más sabrosa.
Nace en Caranavi, Bolivia, una región icónica en el mundo del café de especialidad. Enclavada en los Yungas paceños, Caranavi es un valle fértil, húmedo y biodiverso donde las montañas y la neblina abrazan los cafetales, permitiendo una maduración lenta y natural del fruto. Allí, a 1550 metros sobre el nivel del mar, Mery Avircata, en una pequeña finca, cultiva con paciencia y cuidado estos granos únicos, respetando los tiempos de la tierra y la naturaleza.
En taza:
Encontrás un café jugoso, con mucho carácter, limpio y equilibrado, con aromas a durazno, panela y flores, y sabores dulces y cítricos que recuerdan a miel de abeja, naranja y flores blancas. Al final, un guiño inesperado: una nota leve a pimentón dulce, que le da carácter y profundidad.
Puntaje SCA: 87.5 puntos
Proceso: lavado
Variedad: Java + Pacamara
Región: Caranavi, Bolivia
Altitud: 1550 msnm
Perfil: equilibrado
Productora: Mery Avircata
Este café fue pensado como el primer paso para muchas personas hacia un nuevo ritual del café: más rico, más justo, más verdadero.
Porque el buen café no es un lujo: es lo que merecemos.
Este no es solo un café. Es una bienvenida al café de especialidad.
Una invitación a dejar atrás el torrado, y la idea de que el café es amargo y negro.
Cuando probamos café de especialidad por primera vez, pueden sorprendernos los distintos aromas y sabores. Generalmente dulces, ácidos, florales y frutales.
Es como pasar de un vino blanco dulce a un tinto complejo: al principio choca, hay que acostumbrar el paladar, pero después lo amás. (ya me salió lo mendocino)
Por eso este blend está pensado especialmente para quienes se están iniciando.
Es amable pero no plano, complejo pero no abrumador. Tiene el equilibrio justo para que empieces a descubrir lo que puede ser un buen café... y no quieras volver atrás.
Con Java-Pacamara, empieza otra forma de tomar café en Argentina: más consciente, más honesta, más sabrosa.
Nace en Caranavi, Bolivia, una región icónica en el mundo del café de especialidad. Enclavada en los Yungas paceños, Caranavi es un valle fértil, húmedo y biodiverso donde las montañas y la neblina abrazan los cafetales, permitiendo una maduración lenta y natural del fruto. Allí, a 1550 metros sobre el nivel del mar, Mery Avircata, en una pequeña finca, cultiva con paciencia y cuidado estos granos únicos, respetando los tiempos de la tierra y la naturaleza.
En taza:
Encontrás un café jugoso, con mucho carácter, limpio y equilibrado, con aromas a durazno, panela y flores, y sabores dulces y cítricos que recuerdan a miel de abeja, naranja y flores blancas. Al final, un guiño inesperado: una nota leve a pimentón dulce, que le da carácter y profundidad.
Puntaje SCA: 87.5 puntos
Proceso: lavado
Variedad: Java + Pacamara
Región: Caranavi, Bolivia
Altitud: 1550 msnm
Perfil: equilibrado
Productora: Mery Avircata
Este café fue pensado como el primer paso para muchas personas hacia un nuevo ritual del café: más rico, más justo, más verdadero.
Porque el buen café no es un lujo: es lo que merecemos.